Me quedaré sola, no hay remedio. Me quedaré en el olvido de tu cabeza, de tu memoria, me perderé. Me quedaré sola en el silencio y nadie podrá hacer nada de ello. Me quedaré sola, pero no me preocupa. Me han preocupado tantas cosas en la vida, tantas verdades, tantas mentiras... Tantas tonterías, para llegar a la conclusión de que estaré bien sola. Seré feliz sin ti, sin nadie. Seré feliz y nadie me detendrá en el intento. Seré inmensamente feliz, porque nadie me va a querer tanto como merezco. Nadie me va a querer tanto como deben, porque no estamos listos para amar. No hemos pensado en las consecuencias, en el daño y en el sufrimiento. Me quedaré sola, pero seré feliz. Ese será mi mantra.